CÓMO LIMPIAR LOS OIDOS A NUESTRAS MASCOTAS

¿ CÓMO HACER UNA LIMPIEZA DE OÍDOS A MI MASCOTA?

Y muy importante también: cómo NO hacerla, porque desgraciadamente hemos visto casos en los que usando ciertos productos como agua oxigenada, agua corriente, jabones, alcohol... se han podido causar graves daños al pobre animal. Así que ya lo sabes: esos productos, prohibidos!

 Pero lo primero, ¿por qué tengo que hacerle limpiezas de oídos a mi mascota?

A los perros y los gatos se les ensucian los oídos, especialmente si viven en el exterior, si van a menudo al parque o si les gusta jugar en la playa o bañarse. Los oídos se les llenan de tierra, arena, de restos de hierba, de agua con sal...y todo ello puede acabar irritando su conducto auditivo y causarle malestar.

Además, algunas razas tienen las orejas caídas y no les ventilan adecuadamente. Ejemplos de estas razas serían los labradores, los golden retrievers, los beagles, los basset hound, los cóckers...y todos sus cruces.  Estos animales van a necesitan de estas limpiezas auriculares que les ayuden a controlar su tendencia a padecer otitis.

Y por último, algunos animales producen más cerumen del normal en determinadas circunstancias (como por ejemplo, durante el transcurso de una otitis) o simplemente, sus glándulas del conducto auditivo trabajan a un ritmo mayor  produciendo más secrecciones (por ejemplo,  cuando sufren determinados problemas hormonales). El incremento de secrección de cerumen dentro del oído es otro factor de riesgo para que conducto auditivo enferme.

En todos estos casos, es muy recomendable hacer limpiezas habituales del oído externo, para que esos oídos permanezcan sanos.

En clínica nos habréis visto más de una vez limpiarlos : 

Lo siguiente, ¿con qué frecuencia?

Pues como hemos dicho antes, según su estilo de vida, su conformación anatómica y su propensión a secretar cerumen... la necesidad de limpiezas de cada uno puede variar individualmente. Pero, como normal general, conviene hacer limpiezas quincenales en cada oído para prevenir las otitis. Aunque algunos puedan necesitar limpiezas más a menudo.

Y ¿con qué debo limpiarle el conducto auditivo?

Debemos usar limpiadores auriculares que están hechos a propósito para este fin.

La forma peculiar que tienen el conducto auditivo externo de nuestras mascotas, con una primera porción vertical seguida de una porción horizontal que finaliza con la membrana timpánica, hace que sea como un pozo ciego. Y de la misma forma que se limpia un pozo ciego, el único modo de dejarlo limpio es extrayendo la suciedad desde dentro hacia fuera.

Por eso los limpiadores auriculares llevan sustancias disolventes y que por diferencia de densidad hacen flotar la materia orgánica que se va acumulando dentro del oído.

Además, se acompañan de sustancias desecantes, porque como todos sabéis, el agua no es buena para los oídos. Estas sustancias disminuyen la humedad ambiental del conducto evitando el crecimiento de bacterias y hongos.

Además de estas características generales, algunos limpiadores poseen componentes específicos, como acidificantes, ceruminolíticos más agresivos, insecticidas y acaricidas. Según sea el conducto auditivo de tu animal, nosotros te recomendaremos el producto más apropiado.

Pero hay que tener claro que un limpiador auricular NO es un medicamento para tratar una otitis. Si crees que tu mascota tiene molestias en los oídos, debes venir al veterinario. Si existen dudas, antes de nada, tenemos que mirar con nuestro otoscopio.

    Y NADA de usar bastoncillos : esos los usaremos sólo nosotras en la clínica !! Podríais hacerle daño .

 

Pero basta de teoría...¿Cómo lo hago?

El modo de aplicar estos limpiadores es muy sencillo y rápido: levantar la oreja, introducir lo más posible la boca del limpiador  por el orificio del conducto auditivo, aplicar una pequeña cantidad, pero suficiente, hacer un ligero masaje en dirección vertical, de abajo hacia arriba repetidamente; dejar que se sacuda (cosa que suelen hacer la mayoría), y si no quiere, pasamos directamente al último paso, que consiste en retirar los restos de líquido con material que ha salido del interior del conducto de la entrada del conducto y del pabellón. Esto se puede hacer con una gasa, toallita o hasta con un poco de papel.

Pero si aún te quedan dudas, pásate por alguna de nuestras clínicas, a ser posible con tu perro o gato, y te enseñaremos como hacerlo “en vivo y en directo”.